Me llamo Damián,  tengo 30 años,  4 hijos y   desde chiquito quería ser boxeador profesional.

 Empecé a entrenar cuando tenía 14 años y hace 16  que estoy peleando y haciendo lo a que a mí me gusta.

  Tuve muchas complicaciones.  Me costó superarme porque  mi viejo siempre rechazó la idea de que fuera peleador. Mi mamá era la que siempre me ayudaba,  pero hasta cierto punto.

 Con solo 16 años me tuve que mudar solo y hacer mi vida.  pero ahora tengo una familia y estoy muy  feliz por lograr lo que yo siempre quise:  ganarme la vida boxeando.

  Desde hace 4 años tengo mi propia escuela de boxeo.  Entre todos los alumnos que tengo,  uno se destaca no solo por el gran peleador que es,  si no por que me representa mucho y está pasando por los mismo que yo pase al principio de mi carrera.  Se  llama Thomas, y con sus 14  años tiene una gran cantidad de peleas.  es un chico que aunque el mundo se le venga abajo se mantiene fiel a su sueño  y siempre está para entrenar.  Él,  comparte la misma pasión  que yo para este deporte.

Thomás