martes, 2 de julio de 2019
jueves, 27 de junio de 2019
Me llamo Agustina, tengo 24 años y soy abogada
desde hace dos.
Me costó mucho terminar la carrera ya que es
muy difícil. De chiquita siempre soñé con serlo, hasta que se dio el día y
decidí estudiarla.
Mi primer caso fue en un
Juzgado de Familia. Precisamente, era una familia que estaba por perder su
casa. Luché mucho para ganar el caso, y
lo logré.
Hasta el día de hoy, llevo
tres casos resueltos y me gustaría tener
muchos más.
Agustina.
El perro
Mi nombre es Christian,
tengo 43 años y trabajo en el country
de un club.
Una mañana en
mi trabajo, había un perro con las patitas lastimadas, lo levanté lentamente y
lo llevé a emergencias. Un rato después
llamamos al veterinario porque seguía mal. Horas más tarde lo operaron y le
sacaron las dos patitas de atrás .Hoy sigue en mi trabajo pero tiene que usar
una silla para caminar.
Pilar
POLICIAS
Hay policías a
los que realmente les gusta lo que hacen
y otros a los que no. Muchos están cansados.
En nuestra
sociedad, los policías se encargan de
llevar presa a la gente que comete delitos pero, lamentablemente, hay policías que sufren heridas graves en una persecución.
Hay gente que
odia a los policías, sin embargo, no se
dan cuenta que gracias a ellos la ciudad está cuidada. Ellos las 24HS del día. La mayor parte van dando vueltas o vigilando a
los barrios en sus patrulleros, usan trajes azules y hablan en códigos dentro de su sistema de Seguridad.
GERONIMO
El año pasado
un grupo de trabajadoras sociales y psicólogas realizaron una jornada para
trabajar sobre violencia con chicos de sexto año de diferentes escuelas. En el
medio, se realizó una obra de teatro sobre bullying.
Al finalizar, una alumna dijo que se sintió identificada
porque durante muchos años humillaron y maltrataron a un compañero.
El niño estaba ahí en ese momento, como alumno de otra escuela y, delante de todos, dijo que había sufrido durante muchos años solo, hasta que su
mamá lo cambió de colegio. Ahora por fin
tenía amigos y se sentía feliz.
Paulina
Yo era un autor
de libros de terror. Un día estaba yendo a la casa de mi abuela y un auto me
atropelló. Alguien llamó a la ambulancia y me llevaron al hospital. Al día
siguiente, mi familia me vino a visitar y el doctor les dijo que me daba el alta.
Luego salimos y nos topamos con un ladrón que
nos quiso asaltar, pero afortunadamente
había un policía en la otra esquina y lo arrestó.
Luego todos nos
fuimos felices.
Denis
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